Escrito en March 1, 2021
He estado leyendo el libro: Matilda de Roald Dahl en mi club de lectura, se los recomiendo mucho, pueden conocer el sitio de la profesora en el siguiente enlace Blog educación a la medida Una de las actividades de esta semana es dar unos consejos a los padres de Matilda en unas situaciones donde no la tratan bien. A continuación te presento las situaciones y mis consejos
Padres que no demuestran el menor interés por sus hijos y que, naturalmente, son mucho peores que los que sienten un cariño delirante. El señor y la señora Wormwood eran de esos. Tenían un hijo llamado Michael y una hija llamada Matilda, a la que los padres consideraban poco más que como una postilla. Una postilla es algo que uno tiene que soportar hasta que llega el momento de arrancársela de un papirotazo y lanzarla lejos. El señor y la señora Wormwood esperaban con ansiedad el momento de quitarse de encima a su hijita y lanzarla lejos, preferiblemente al pueblo próximo o, incluso, más lejos aún. Pág 13
Cuando uno tiene hijos es para quererlos, no para tratarlos mal. Deberían querer a Matilda y aunque no la quieran mucho, tratenla bien, que solo estará con ustedes algunos años más. Puede que después la extrañen. Desen la oportunidad de conocerla bien, mientras esté con ustedes, porque si la siguen tratando mal, cuando sea grande, ya no querrá estar con ustedes nunca
-No quiero saber de qué trata - rugió el señor Wormwood - Estoy harto de tus lecturas. Busca algo útil que hacer - con terrorífica brusquedad comenzó a arrancar a puñados las páginas del libro y a arrojarlas a la papelera. Pág 44
Lo que yo le aconsejaria, sería: En primer lugar, controlar su ira, puede hacerlo respirando hondo varias veces por 10 segundos. En segundo lugar, podría apagar la tv y leer en familia, para ver lo divertido que es leer y pasar un gran rato familiar. Si rompio el libro, comprarlo y llevarlo a la biblioteca.
-Papá-dijo-, ¿no podrías comprarme algún libro?
-¿Un libro? - preguntó él. ¿Para qué quieres un maldito libro? Para leer, papá.
-¿Qué demonios tiene de malo la televisión? ¡Hemos comprado un precioso televisor de doce pulgadas y ahora vienes pidiendo un libro! Te estás echando a perder, hija... Pág 15
Lo que yo haría sería decir: Si quieres libros ve a la biblioteca y saca el libro o, si haces oficios te daría dinero por ello y también podría darte una mesada semanal para que puedas comprarte el libro que quieras con el dinero que ahorres.
En cuanto a ver televisión todo el día le aconsejaría: no ver tanta televisión y que mejor hagan cosas en familia, para mejorar su relación. Por ejemplo: jugar un juego de mesa o armar un rompecabezas, incluso pueden jugar un videojuego.